La Civilización Maya supo interpretar al Cielo, las Estrellas, al Sol y a los Planetas. Entendió que todo responde a un ritmo cósmico, desde el nacimiento hasta la muerte, y es por ello que el día en que nacemos es especial, ya que tiene una energía particular y al nacer quedamos impregnados de ella.

Esa energía es la que llamamos KIN y al conocerla recordamos y activamos nuestra MISIÓN personal, nuestro PROPÓSITO en esta vida, y con él, los desafíos que tendremos para cumplirlo, las energías que nos activan, las que nos ordenan y organizan, las que nos empoderan, aquellas que nos vinculan con los demás, las que nos llevan a la acción, las que nos ayudan a trascendernos. Los invitamos a recordar este maravilloso universo MAYA a partir de este Taller Introductorio que nos permitirá acercarnos a este Mágico Saber.

Al internarnos en “este mundo” comienzan a hacerse frecuentes las Sincronías (lo que comúnmente llamamos casualidades o coincidencias, que sabemos que no son casuales)  porque nos vamos conectando con el Tiempo Natural, teniendo en cuenta que quien controla nuestro tiempo, controla nuestra propia mente.